ABSTRACT
La necesidad de atención odontológica a las mujeres embarazadas es frecuente en México, por lo que el dentista debe estar preparado para escoger un fármaco seguro para la madre y el feto. El producto en desarrollo puede ser blanco de una acción teratológica en cualquier momento del desarrollo, pero la sensibilidad máxima es durante el primer trimestre del embarazo, por lo que cualquier tratamiento electivo debe posponerse. En cualquier momento del embarazo, el riesgo de bacteremia o septicemia son mayores para el feto que el efecto tóxico de un antibiótico. En antibiótico de elección en las infecciones odontogénicas es la penicilina, de manera específica, la amoxicilina, por su mejor farmacocinética (absorción, vía media) y efecto posantibiótico y la clindamicina cuando el paciente es alérgico o cualndo la infección no cede con la amoxicilina. La asociación de enfermedad periodontal con el riesgo aumentado de tener productos prematuros o con bajo peso al nacer, hace necesario considerar el tratamiento odontológico para evitar infecciones odontogénicas durante el embarazo